Número de jugadores: De 2 a 6 personas. ¡Ideal para armar un grupete chico o mediano!
Tiempo de juego: ¡En solo 15 minutos! Es perfecto para esas ganas de jugar algo rápido entre otras cosas.
A partir de qué edad se recomienda: A partir de los 6 años. ¡Hasta los más chicos se prenden!
Tipo de juego: Es un juego de cartas que es puro reflejo y velocidad, con un toque de observación y deducción. ¡Ideal para la familia y las fiestas!
Cómo se juega:
La premisa es simple y desopilante: ¡alguien hizo caca en la sala y nadie quiere ser el culpable! El juego arranca con cada jugador teniendo cartas de diferentes mascotas. El más chico empieza jugando una carta de su animal (por ejemplo, el conejo) y dice algo así como: "¡No fue mi conejo el que hizo caca, creo que fue el gato de alguien!". Inmediatamente, todos los demás tienen que apurarse a jugar una carta de gato y pasar la culpa a otro animal. La idea es deshacerte de tus cartas lo más rápido posible. Si alguien no tiene la carta del animal al que se le echa la culpa, o es el único con cartas en la mano, ¡su mascota es la culpable y se lleva una ficha de caca! El juego termina cuando alguien acumula tres fichas de caca, y el que tenga menos es el ganador.
Cantidad y tamaño de cartas:
El juego trae 36 cartas de animales (seis sets de seis animales diferentes, cada set de un color distinto) de 63,5x88mm y 13 fichas de caca.